Situada en el centro urbano de la Villa. En su entorno se aprecia una disposición radial de calles que sirven de comunicación con los diferentes barrios de la villa. Es la obra más acabada de la cantera románica de Allariz, empleándose fórmulas compostelanas del Maestro Mateo. La Iglesia se levantó en el período de transición entre los siglos XII y XIII, aunque su construcción había sido ordenada por la Corona a finales del XI, al tiempo que se inicia la construcción de la Catedral de Santiago de Compostela. Artísticamente la Iglesia tiene una planta de nave única con presbiterio de tramo recto y ábside semicircular. Del siglo XII conserva la nave y la Portada Norte, que recuerda las tradiciones prerrománicas. En el exterior destaca la cabecera de la iglesia, con un ábside semicircular levantado hacia 1205, con un paramento dividido en varios paños de columnas y capiteles vegetales e historiados. Tiene ventanas con arquivoltas decoradas a base de arquitos. El alero del ábside sobre el que monta el tejado lo sostienen arquitos con canecillos con gran variedad temática de carácter popular, que producía la fantasía de los canteros gallegos. La fachada presenta semejanzas con el foco de la capital, con una clara arquitectura románica. En el interior presenta una nave única con techumbre de madera, arco triunfal, y el tramo del presbiterio se cubre con bóveda de cañón y el ábside con bóveda de cuarto de esfera. Conserva un frontal de altar románico decorado con una arquería de medio punto con claras influencias de Mateo. En la sacristía y capillas adosadas hay sepulcros góticos realizados por escultores alaricanos durante los siglos XV y XVI. De las capillas cabe destacar la capilla de la Virgen de la Esperanza, renacentista, del primer tercio del siglo XVI con arco de ojival, con elegante decoración geométrica y cubierta con bóveda estrellada.