Nos gustó el sitio dónde está ubicado, es precioso poder estar rodeado de naturaleza.
El entorno transmite paz, los animales están bien cuidados. No me gustó ver un cartel en el que decía: NO DAR DE COMER A LOS GATOS! Hay muchos y son seres vivos indefensos, que no se les pueda ofrecer algo de comer no me parece bien.
El iglú Lyra (fue el que nos tocó) no estaba mal, pero a nuestro parecer, relación calidad - precio no vale 160€ (que fue lo que pagamos)
Le falta mantenimiento y limpieza, las cosas se caen,...
En la pared de delante del lavado, habían restos de pasta de dientes de todos los colores... Habían telarañas, el suelo estaba sucio,...
Nos faltaron algunos amenties, gorro de ducha, peine, cepillo de dientes,...
El desayuno estaba muy bien, era tipo buffet y los productos que habían eran de calidad. Desde el queso, hasta el pavo, jamón dulce, pan,...
La idea del "iglú" está genial, pero necesita mejorar sobretodo la limpieza.
Vimos las casitas en los arboles y nos parecieron preciosas, quizás volvamos a una de ellas.
El entorno transmite paz, los animales están bien cuidados. No me gustó ver un cartel en el que decía: NO DAR DE COMER A LOS GATOS! Hay muchos y son seres vivos indefensos, que no se les pueda ofrecer algo de comer no me parece bien.
El iglú Lyra (fue el que nos tocó) no estaba mal, pero a nuestro parecer, relación calidad - precio no vale 160€ (que fue lo que pagamos)
Le falta mantenimiento y limpieza, las cosas se caen,...
En la pared de delante del lavado, habían restos de pasta de dientes de todos los colores... Habían telarañas, el suelo estaba sucio,...
Nos faltaron algunos amenties, gorro de ducha, peine, cepillo de dientes,...
El desayuno estaba muy bien, era tipo buffet y los productos que habían eran de calidad. Desde el queso, hasta el pavo, jamón dulce, pan,...
La idea del "iglú" está genial, pero necesita mejorar sobretodo la limpieza.
Vimos las casitas en los arboles y nos parecieron preciosas, quizás volvamos a una de ellas.