Es la primera vez que comento acerca de un alojamiento, pero estuve alli en Semana Santa con unos amigos, y la verdad las fotos no hacen juicio a lo precioso que es todo aquello, tan cerca de todo y a la vez tan tranquilo, ya habia visitado otros alojamientos en cueva de la zona, puesto que nos gusta éste tipo de alojamiento, pero el año que viene pienso repetir en éste, es muy familiar y te tratan genial, de tu a tu, nada de recepcionistas mecanizadas, es muy humano, muy atentos y todo perfecto, pequeños detalles como las toallas, las sábanas y hasta los platos del color de esa cueva me han hecho sentir mas reconfortada. Muy bien, la verdad, sobran palabras