Ha sido una experiencia magnífica. Jordi es una persona súper servicial y simpática. La Masia está en un estado perfecto: limpia, nueva, una PASADA. Los alrededores son preciosos. Vamos, mejor imposible. Hicimos barbacoa, había parque para los peques, la calefacción estupenda, jordi nos trajo una coca típica de la zona... Repetimos SEGURO!