Casa Rural

La Casa de la Abuela

10,0Fantástico
Ribera Del Duero, Peñaranda De Duero

Ubicado en la población burgalesa de Peñaranda de Duero, encontramos la Casa de la Abuela, con una capacidad de 6 personas.

La estancia, con interiores totalmente equipados, cuenta con una decoración de muebles castellanos y detalles rústicos.

Esta casa supone el lugar definitvo para descansar, desconectar del mundo y pasar unos días en familia o con amigos.

Visita lugares de interés cercano como Peñaranda de Duero, el Monasterio de La Vid y las Ruinas del Clunia.

Resumen

  • 3 Dormitorios
  • No se admiten mascotas
  • 6 Personas

Acerca de la propiedad

  • Aparcamiento
  • Televisión
  • Cocina
  • Jardín
  • Lavavajillas
  • Lavadora
  • Microondas
  • Calefacción

Valoraciones de usuarios

Excepcional
10,0
Arantxa MARROQUIN, ago 2018
Hemos disfrutado mucho en esta casa rural todos los amigos que fuimos. La casa está muy completa con todo el menaje, sábanas y toallas y tb muy limpia. El trato ha sido maravilloso tanto de los propietarios como de la gente del pueblo. El entorno perfecto para visitar la tierra del vino. Aunque la casa está pegada a la carrera es un sitio tranquilo y se descansa bien. Seguro que volveremos. gracias por todo

Excepcional
10,0
Javirt, ago 2018
Casa estupenda para pasar unos días con amigos o familia. Isabel, la propietarias nos aportó un trato inmejorable. La limpieza y el equipamiento perfecto, pena de no tener más días para disfrutar del entorno. Muy recomendable para aquellos que quieran visitar esta zona maravillosa que ofrece mucha cultura y espectacular situación para los amantes del vino de Ribera y la naturaleza. Gracias, seguro que volveremos pronto.

Excepcional
10,0
carmen, ago 2015
Hemos estado cuatro días alojados en La Casa de la Abuela. Nuestra estancia ha sido de ensueño. La casa está dotada hasta el más mínimo detalle, todo listo para entrar y para disfrutar y relajarse. La cocina con todo lo necesario, los baños, la decoración, la limpieza y el orden. Hasta un patio fresquito donde relajarse y mantener una conversación tranquila al ritmo que marcan las campanas del campanario. El trato con la propietaria inmejorable, pendiente en todo momento de nuestra comodidad. El entorno inmejorable también. Un pequeño pueblo con todas las comodidades y con la tranquilidad de la gente y sus calles, con la plaza para tomarse un vinito relajados mientras los niños corren y juegan tranquilamente por las calles y plaza. Hay que volver a Peñaranda más a menudo. Gracias Isabel por hacer nuestra estancia tan y tan agradable.

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