La casa es preciosa. No le falta de nada. Ideal para descansar y desconectar. Loli su propietaria es simpatiquisima, amable,limpia... a sido todo un placer el conocerte. Por poner un pero la televisión es muy pequeña y que no hay wifi pero se compensa con la cantidad de detalles que loli tiene con sus huéspedes.El desayuno que nos deja mas que para 3 personas eran para 12.Puedes recojer los huevos y comertelos al igual que los productos del huerto. En el pueblo hay un restaurante "entre riscos" que es ideal para comer y cenar, y sus propietarios son muy simpáticos.
Volveré seguro. Gracias por todo.
Volveré seguro. Gracias por todo.