La Masía es estupenda, habitaciones muy amplias, todo nuevo y muy limpio. La piscina no muy grande pero muy bien, la limpiaban cada día. La zona totalmente aislada que es lo que buscábamos, desconexión y relax total. Quizás pondría algún ventilador en habitaciones y salón ya que nos ha hecho mucho calor y por la noche costaba dormir, y alguna sombrilla en la zona de la piscina o delante de la casa, para poder estar a la sombra porque el sol achicharraba. Marcel muy atento y amable. Y los burros muy simpáticos!!!!! En definitiva, volveremos !!!!!