Acabamos de llegar de pasar 9 días en la casa Ezkilenea y hemos venido con ganas de volver otra vez. No hay palabras para describir lo a gusto que hemos estado. La casa es magnífica. Está situada en una primera planta y los dueños (gente muy atenta y agradable) viven en el piso de arriba. Dispone de 3 habitaciones muy amplias y 2 cuartos de baño completos y amplios. La cocina está equipada al detalle, con lavavajillas y lavadora incluidos.
Además de ser quizás la mejor casa rural en la que hayamos estado (y hemos estado en bastantes), su situación geográfica, a mitad de camino entre Donosti y Pamplona, la hace mucho más atractiva, dado que permite acceder a los principales lugares de interés de Navarra y Euskadi en poco tiempo.
Por lo que respecta al pueblo, Lekunberri, es muy atractivo, lleno de casas antiguas y muy bien conservadas y dotado de muchos servicios y tiendas.
Por último, dar las gracias a los dueños, Oier y Raquel, por todas sus atenciones y su trato tan agradable. Esperamos volverlos a ver pronto, "musus" para sus niños.
Además de ser quizás la mejor casa rural en la que hayamos estado (y hemos estado en bastantes), su situación geográfica, a mitad de camino entre Donosti y Pamplona, la hace mucho más atractiva, dado que permite acceder a los principales lugares de interés de Navarra y Euskadi en poco tiempo.
Por lo que respecta al pueblo, Lekunberri, es muy atractivo, lleno de casas antiguas y muy bien conservadas y dotado de muchos servicios y tiendas.
Por último, dar las gracias a los dueños, Oier y Raquel, por todas sus atenciones y su trato tan agradable. Esperamos volverlos a ver pronto, "musus" para sus niños.