La casa es pequeñita pero muy acogedora, y la zona es muy tranquila, perfecta para desconectar y relajarse. Las playas de la zona son geniales. Las habitaciones están muy bien, por poner alguna pega diré que las máquinas de aire de las habitaciones son algo viejas, enfrían poco y hacen bastante ruido. El sofá es pequeño e incómodo. Por todo lo demás la casa es perfecta.