Estancia perfecta, muy limpia y cómoda adaptada para niños perfectamente equipada , camas grandes y cómodas , a destacar el trato y la atención de Manuel y José siempre pendientes de todo para sentirse como en casa, el pueblo bonito y la gente muy amble, para repetir y en el bar de la piscina se puede ir a comer con perro, admiten mascotas. Encantados con la estancia.