Estupenda casa para desconectar. Muy tranquila, por la mañana te despiertan los pajaritos en lugar del despertador. La cocina es estupenda y la picaña esta riquisima. Tiene muchos sitios para estar sentando disfrutando de la naturaleza. La piscina es enorme. Te tratan como si fueras uno mas de la familia. Repetiremos mas veces.