Estuvimos en la Torre Del Valent por una semana a finales de Julio con nuestras hijas y yernos. Todos disfrutamos mucho esa semana de la casa, de la piscina, del terreno exterior y del entorno, rodeados de olivos, almendros y avellanos, una preciosidad.
El trato superior, Gilbert y su amiga encantadores. Nos prepararon incluso una excursión para conocer algunos sitios de los alrededores, una experiencia muy bonita.
Desgraciadamente la semana se pasó volando y tuvimos que abandonar la casa. Nos queda un my buen recuerdo y esperamos volver otra vez en el futuro.
El trato superior, Gilbert y su amiga encantadores. Nos prepararon incluso una excursión para conocer algunos sitios de los alrededores, una experiencia muy bonita.
Desgraciadamente la semana se pasó volando y tuvimos que abandonar la casa. Nos queda un my buen recuerdo y esperamos volver otra vez en el futuro.