Arbón está situado en un valle rodeado de montañas.
Tiene un paisaje caracterizado por los tonos verdes de los prados y azul oscuro de los estratos de pizarra.
Carácter apacible y orientado hacia el mundo campesino que le rodea.
Es un excelente ejemplo de vega fértil. En las huertas, protegidas de las heladas, se cultivan los frutales como el naranjo, que en la actualidad están muy abandonados.
Es uno de los pueblos que ha vivido como ninguno el desarrollo agrario, lo cual contribuyó a cambiar el aspecto del Pueblo, la forma de trabajo y el propio modo de vida. Esta evolución sufrida está en relación de las necesidades para formar la unidad hogar-trabajo.
Tiene 40 casas, bastante agrupadas, que en general respetan las típicas formas de caserío. Hórreos y algún cabazo que denota la cercanía con Galicia.
Agricultura y en especial ganadería son sus recursos fundamentales.