Qué ver en Torrejoncillo Del Rey

Nuevo municipio formado por la agrupación de varios lugares, villas y aldeas, mediante decretos de fusión o de incorporación, situadas en el inmediato entorno de la villa de Torrejoncillo del Rey, constituida en sede del nuevo Ayuntamiento.

Los antiguos municipios integrados en la nueva entidad municipal son los de HORCAJADA DE LA TORRE, NAHARROS, VILLAR DEL AGUILA, VILLAR DEL HORNO, VILLAREJO-SOBREHUERTA y VILLAS DE NAHARROS.

Situado en una de las estribaciones sureñas en los Altos de Cabrejas, entre la carretera nacional Tarancón-Cuenca y la local que va de Albadalejito a Zafra de Záncara.

HORCAJADA DE LA TORRE es un antiguo municipio incorporado al de Torrejoncillo del Rey.

Destaca el conjunto de la Plaza Mayor dentro del trazado urbano de la población.

Presidida por la magnífica iglesia parroquial, esta plaza tiene grandes calidades ambientales y escenográficas, por sus características espaciales y la calidad de gran parte de la edificación que la conforma.

Fuera del ámbito de la plaza, el Pósito Pío es un ejemplo significativo y hermoso de una escasa y singular tipología constructiva; y fuera del pueblo, en sus cercanías, puede verse un interesante ejemplar de otra tipología, el puente sobre el río Cigüela, construcción del siglo pasado, de tres ojos compuestos por arcos muy rebajados entre contrafuertes de sillería.

Pero, sobre todo, tres magníficos edificios alberga en su interior el casco urbano de esta población.

La ermita de los Remedios, en la calle de la Estrella, obra de los siglos XVII-XVIII, compuesta por una sola nave que se remata mediante cabecero elevado del resto y cubierto por cúpula de media naranja sobre pechinas y cornisa de arranque; el resto de la nave se cubre por medio de bóveda de cañón con lunetos. Toda la decoración es uniforme y se resuelve con motivos vegetales de estilo barroco. En el exterior cuenta con fachada toda de sillería, con acceso adintelado sobre jambas apilastradas y hornacina labrada en los propios sillares. Remata la composición un pequeño campanil. Al fondo del presbiterio guarda un retablo barroco de tres cuerpos y dos órdenes superpuestos en madera policromada.


Sito en la Plaza Mayor, el Ayuntamiento es un edificio exento del siglo XIX, de planta rectagular y dos alturas. También en la Plaza Mayor, presidiéndola, se encuentra la parroquia de San Pedro Apóstol, del siglo XVII. Se accede a ella a través de escalera de dos tiros, opuestos, contenidos por muro frontal de sillería labrada. Se trata de una iglesia de una sola nave en forma de cruz latina, de brazos y cabecero muy cortos; estos últimos, así como el resto de la nave, se cubren por bóveda de cañón con lunetos. El piecero queda dividido en tres tramos entre altas pilastras. El crucero queda cubierto por bóveda de media naranja sobre pechinas y arcos torales. Toda la fábrica interior es de sillería vista parcialmente. El exterior responde fielmente a la estructura del espacio interior, destacando el volumen del crucero y la torre, que es de planta cuadrada y cuyo primer cuerpo forma conjunto con la fábrica y los dos últimos se destacan. A los pies, portada barroca compuesta por columnas clásicas exentas sobre pedestal, que soportan un entablamento bajo frontón roto y rematado por hornacina. La iglesia está fechada en 1677 y sustituyó a otra más primitiva. Guarda un importante altar barroco en el presbiterio.

VILLAR DEL AGUILA es otro antiguo municipio incorporado al de Torrejoncillo del Rey. Dentro del trazado tiene interés el espacio organizado entre la calle de la Iglesia y la calle de San Pedro, conectadas por un callejón, que articula un conjunto urbano notable por el elevado nivel de las edificaciones, acompañadas por pequeñas plazuelas o ensanchamiento de la calle, en el caso de la iglesia, con un atrio cerrado en piedra y empedrado.

Un fuerte desnivel permite la contemplación del entorno físico, predominantemente de tipo agrícola, así como la pequeña ermita de San Sebastián.

En la calle de San Pedro se encuentra situada una casa palacio del siglo XVI, edificio exento, de planta rectangular y dos alturas, cuya construcción es de sillar, que cuenta con una interesante portada y una cornisa rematada con pináculos a cada lado. Y en la calle de la Iglesia, otra casa palacio, de la misma época, tipología y estructura, con una portada enmarcada por un baquetón y balcones en la planta alta, y cuatro ventanas en la planta inferior.

La iglesia parroquial de Santo Domingo de Silos, de los siglos XVI y XVII, tiene la mayor parte de su fábrica exterior construida en sillar, un ábside poligonal con contrafuertes y, en el piecero, una torre de tres cuerpos, con ojos de medio punto en cada cara del último, y cornisa de separación en cada nivel, y un remate de almenas; bajo el alero, una cornisa de dentículos recorre el edificio. El interior es una planta rectangular de una sola nave, con ábside exagonal y coro elevado en el piecero, con bóvedas de crucería en las cubiertas, arcos fajones resaltados, apoyados sobre pilastras adosadas y un arco triunfal. En el ábside se encuentra un retablo renacentista fechado en 1512. Se abren cuatro capillas en el lado izquierdo y una en el derecho, con diferentes tipos de cubiertas, magníficas decoraciones, rejería de gran calidad, extraordinarias puertas renacentistas, retablos, entablamentos de gran riqueza decorativa y otros importantes elementos renacentistas y barrocos.