Nace como municipio independiente en 1734.
Caracterizado por sus grandes barrancos y depresiones, este municipio del oeste de Gran Canaria, cuenta con la mayor cuenca de la isla, La Caldera de Tejeda, además de los macizos de Altavista y Tamadaba.
Su base económica es la agricultura, especialmente la papa y el millo, complementándose con el pastoreo de cabras, ovejas y vacas. Actualmente, se lleva a cabo una repoblación forestal importante.
Visita obligada es la ermita de la Virgen de la Cuevita, excavada en un risco.
Casi todo el municipio está incluido en el Parque Natural de Tamadaba, un área boscosa con gran variedad florística.
Las formas de vida tradicionales se mantienen hasta la fecha en algunos lugares del municipio. Son destacables las cuevas labradas, tomadas por algunos como viviendas.
La fiesta de la Virgen de la Cuevita, una de las principales del municipio,constituye una de las tradiciones más arraigadas del lugar.