Un pueblo pequeño en sus dimensiones si miramos el número de habitantes, sin embargo, encontramos su grandeza en el bello paisaje que rodea a este núcleo. Varias salidas desde Mendaro harán las delicias de los montañeros: Arno, Kanpazar, Urnobieta, Gaintxipixa, Otarre, etc.
El valle de Kilimón que acoge en su extremo el casco de Mendaro, es de origen kárstico. Existen en esta zona numerosas simas que hacen del valle un auténtico paraíso para la práctica de la espeleología. Encontramos también diversos yacimientos, algunos de ellos de interés arqueológico.
El río Kilimón, que da nombre al valle, y el Intxusai son ríos interiores de gran belleza y bonitos lugares de paseo, donde hay hermosas cascadas y caídas de agua como la de Intxusai. Son lugares tranquilos para los aficionados a la pesca.
En Mendaro encontramos la Casa "Chocolates de Mendaro-Saint Girons", empresa familiar que desde 1850 elabora chocolates artesanos de alta calidad siguiendo fórmulas tradicionales. Resulta agradable la visita a esta tradicional empresa, y mas agradable aún la degustación de sus productos.
es un pueblo pequeño pero merece la pena visitarlo, ademas de ser tranquilo.