Qué ver en Passanant

Municipio de la Conca de Barberá, situado en la parte noroeste de la comarca, en el sector meridional de los Comalats, en las primeras mesetas meridionales de la plataforma de la Segarra. El término, con una extensión de 27´48 Km2, está drenado por diversos torrentes, que desembocan en el río Corb. Estos torrentes son los de Forès, Saniol, Glorieta, y el barranco de Belltall.

Atraviesa el municipio la carretera comarcal de Salou a Ponts, después de superar el collado de Belltall, pasa por el centro de ésta población, comunicando la Conca y la Segarra.

Por su parte central, es atravesado también por la carretera local que va desde Artesa de Segre-Montblanc hasta Sarral, pasando por el collado de Forès, atravesando Passanant y juntándose con la carretera de Salou a Ponts, cerca de Ciutadilla.

El pueblo, a 714 m. de altitud, está situado en una pequeña meseta en la parte septentrional del municipio. Cuenta con los agregados de Belltall, la Glorieta, el antiguo término de la Sala de los Comalats, el despoblado de los Vilars y la aldea de la Pobla de Ferran.


La repoblación de los Comalats fue encomendada, durante el último cuarto del siglo XI, por los condes de Barcelona a la familia Cervera, los cuales edificaron fortificaciones en algunos lugares de la comarca.

El término de Passanant es citado, en 1079, como confrontación de la cuadra de Poal dentro del término del Castillo de Forès.

A mediados del siglo XII, el lugar era posesión de Ramón de Cervera, que en 1182 lo dejó en testamento a su hijo Guillem de la Guardiolada, y éste, en 1234 a su hija Mateua, casada con Galcerán del Pinós. Muerta sin descendencia, y después de diversos litigios, quedó en posesión de su madre la Marquesa y de su hermana Geralda. Ambas religiosas del Orden del Hospital, cedieron a esta orden, entre los años 1251 y 1266, todos sus derechos.

La Orden Hospitalera adquirió el pleno dominio sobre estas tierras cuando compró, en el año 1380, la jurisdicción que quedaba en poder de la corona. Hasta el año 1406 formó parte de la Comanda de Cervera, pero a partir de esta fecha se integró en la Encomienda de Barcelona. Los Hospitaleros poseyeron el lugar hasta la extinción de los señoríos.