Corrales del Vino es un pueblo que se caracteriza por la profusión de casas de piedra arenisca de sillería, levantadas en el siglo XIX. Asimismo, se puede encontrar en él hermosas bodegas en los sótanos de las casas con arcadas de piedra tallada. La iglesia parroquial consta de tres naves de diferente anchura, que rematan en tres ábsides poligonales de ricas bóvedas de crucería claramente góticas. La puerta meridional está precedida de un gran pórtico. En su interior se encuentra una Virgen románica de piedra, del Siglo XII, y el llamado Cristo del Miserere, gótico, del siglo XIV. Junto al cementerio se levanta la ermita de Nuestra Señora de las Angustias, con una fachada principal armónica. Toda ella es de la segunda mitad del XVIII.
Cuenta con dos pedanías: Fuentelcarnero, una localidad a punto de extinguirse, pero que tuvo una gran importancia en la comarca años atrás. En el interior del templo, las naves están separadas por arcos apuntados doblados, que descansan sobre pilares de estructura románica, aunque su decoración evidencia ya los inicios del gótico. Los temas que presenta son muy variados, alternan los vegetales con los figurados de carácter fantástico y alegórico.
La otra localidad perteneciente a este municpio es Peleas de Arriba. El pueblo se asienta a lo largo de una colina, dominado desde la parte más alta por la iglesia parroquial y por el innumerable número de bodegas excavadas. Muy próximo a la carretera se ubican los restos de un importante monasterio de Santa María de Valparaíso. Varios manantiales proporcionan la humedad para fecundar pequeños huertos.