La casa era preciosa, un jardín enorme para que los niños disfruten con camas elásticas, futbolín, Villar... vistas preciosas a un río, cerca de todo, buen trato, la casa acogedora, y la anfitriona muy amable y atenta. En fin, no se puede pedir más. Volveremos a repetir segurísimo. Lo recomiendo al 100%.