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Que ver en Baides
Fue Baides desde muy antiguos tiempos un enclave señalado e importante como lugar de paso y pontazgo sobre el Henares. Quizás habitáculo de los antiguos celtíberos, parece seguro que por aquí pasaba la calzada romana desde Mérida a Zaragoza, pues algunos hallazgos esporádicos así lo atestiguan.
Tras la reconquista de la zona a fines del siglo XI, quedó incluida dentro del amplio territorio comunal de la villa de Atienza, quedando luego incluida en su segregado ámbito de Jadraque. Se sabe que en el siglo XV ostentaban el señorío de Baides los poderosos caballeros López de Estúñiga: en la primera mitad de dicha centuria era su poseedor don Diego López de Estúñiga, y en la segunda su hijo y nieto don Pedro y don Francisco, respectivamente. de esta familia, que poseía señoríos, comarcas y pueblos en el actual territorio de Guadalajara, pasó Baides, junto con el estado de Galve, a los condes de Monterrey, y de éstos, tras varias transmisiones, vino a los condes de Salvatierra. El palacio de estos señores aún se conserva, aunque remodelado y modernizado, dentro del pueblo, rodeado de alta valla y magnífico jardín.
La iglesia parroquial se sitúa en lo más alto del pueblo, y es un ejemplar arquitectónico del siglo XII, y que tras una cuidada restauración ha ofrecido sus encantos románicos hasta hace 10 años ignorados. La nave principal de este templo ofrece sus grandes pilares que sostienen el artesonado de madera, hecho en el siglo XVIII. El presbiterio, algo más estrecho, ofrece la imagen de su retablo múltiple, cuajado en hornacinas y repisas de santos y santas habituales. En lo alto, un escudo de armas, que sobre la plata ofrece una banda negra, y en la bordura una cadena de oro: pregona así que fueron los Zúñiga quienes pagaron, en el siglo XVII, esa panoplia inmensa para la devoción de Baides.
La galería de acceso al templo estaba orientada al norte. Se trata de una sencilla secuencia de arcos, semicirculares, apoyados sobre capiteles emparejados, que a su vez descansan en columnas de fuste muy corto y rechoncho, descansando todavía en un corrido basamento de sillares que, al estar roto y ocupado por basto mampuesto en los dos arcos centrales, nos permite suponer que era por éllos por donde se realizaba el paso desde el exterior al atrio porticado de este templo humilde y bello. Los capiteles románicos de Baides, fueron desgraciadamente picados y en gran parte se han perdido para siempre. Se ven en éllos palmetas, hojas de acanto, algunas finamente talladas, y en un rincón asoma la cabeza de un personaje que recuerda, levemente, las cosas que en Pinilla de Jadraque tallara un artesano de tradición mudéjar.
En su interior, la pila bautismal en el centro del ámbito resume la luz y el silencio del templo. Es una pieza también muy antigua, del mismo siglo en que fuera levantado el templo, y en ella unas filigranas sencillas y geométricas recorren su costado generoso. Se veneran en Baides las Vírgenes de la Paz y la de la Soledad. La primera es, lo mismo que San Roque, patrona del pueblo.
En este lugar nació el conocido novelista español Angel María de Lera, cuyo padre ejerció en Baides de médico rural.
Que visitar en Baides:
- Serranía de Guadalajara
- Huermeces del Cerro
- Mandayona
- La Alcarria
- Villaseca de Henares
- Viana de Jadraque