En esta pequeña villa situada en un valle y rodeada de cerros, formando unos preciosos paisajes en su entorno; enlazamos con otros municipios de la comarca, como pueden ser: Cifuentes, Riba de Saélices, Maranchón y Alcolea del Pinar.
Tenemos a la entrada de la localidad, y al suroeste, salinas construidas en época de Carlos III y de un gran interés. Las forman un conjunto de edificios; almacén central, de planta circular, portada al sur barroca, almacenes para la sal, sin techumbre, artesas y estanques.
En el siglo XIX su explotación proporcionaba 9320 fanegas de sal blanca, granulada y de muy buena calidad.