Casas rurales en La Coruña

A Coruña, provincia más poblada de Galicia, es también la que posee en su geografía la capital de la comunidad, Santiago de Compostela, un lugar mundialmente conocido gracias a su Catedral, la Praza do Obradoiro y la arquitectura de sus calles y monumentos. La ciudad destaca, además, por una importante actividad que aglutina turismo rural, cultura, religión y tradición: el famoso y de importancia mundial Camino de Santiago.

La provincia de A Coruña destaca por sus suaves temperaturas y constantes precipitaciones a lo largo del año, que dotan a sus paisajes y rutas de senderismo de una vegetación singular e inigualable, y de una naturaleza verde envidiable que anima al viajero a adentrarse en la belleza de sus pueblos y ciudades más populares como Muros, Noia, Ortigueira, Fisterra o Ferrol.

A Coruña destaca por el contraste de su geografía: a grandes ciudades como la propia Coruña, con su espléndida Torre de Hércules (el faro más antiguo del mundo), Santiago o Ferrol se unen pequeñas villas marineras como Boiro, A Pobra do Caramiñal, Rianxo o Muxia, que gozan de bellos paisajes de la, a veces calmada, en otras ocasiones bravía, costa atlántica gallega que, en esta región, adquiere la denominación de ‘Costa da morte’.

A su vez, la provincia gallega cuenta con importantes recursos naturales de interés para el viajero: el Parque Natural de las Fragas del Eume, de interés turístico nacional por su riqueza en cuanto a fauna y flora (posee impresionantes lagos, valles y bosques alrededor del río Eume), las Dunas de Corrubedo, un inmenso arenal ubicado en torno a las playas de Ribeira y las Lagunas de Carregal y Vixán, un parque natural cuyas dunas, con sus avances y retrocesos, son las que marcan la extensión y la forma de este inusual paraje.

Disfruta de las casas rurales cerca de la playa, descubre la naturaleza interior y costera de esta hermosa provincia del noroeste español y sumérgete en playas como la de Santa Cristina, en Oleiros, las de la Ría de Muros y Noia, Carnota, Corcubión o las de El Ferrol.

La provincia invita a descubrir, además, importantes enclaves de interés para el visitante como el Cabo Fisterra, considerado por los romanos el fin del mundo (de ahí su nombre). Las impresionantes vistas costeras de esta maravilla natural reflejan la belleza del mar gallego y suponen un contraste entre la tranquilidad y la ferocidad del océano.

La gastronomía tampoco dejará indiferente al viajero, pues combina lo mejor del interior y de la costa a base del buen marisco, los pescados cocinados a la gallega (con cebolla, ajo y zanahoria) y las caldeiradas de carne.